El Forjista
En su libro Sinceramente, Cristina explica cómo se tomó la decisión de nacionalizar las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP) que habían surgido a partir de la privatización de las jubilaciones realizada durante el gobierno de Carlos Menem, estas empresas se quedaban con un porcentaje exorbitante de las jubilaciones y no aseguraban a los beneficiarios un haber mínimamente digno, sometiéndolos a un trámite que en algunos casos tardaba un año o más.
En el momento de adoptarse esta trascendental medida los jubilados habían aportado 117.900 millones de pesos, de esa cifra las administradoras se quedaban con el 31 %, es decir con 37.096 millones de pesos, consumando una estafa monumental.
La crisis desatada en el 2008 también había producido una pérdida considerable en los fondos de los jubilados que se encontraban en poder de las AFJP porque tenía parte de su cartera invertida en acciones y otros activos cuyos valores se habían desplomado.
Para octubre de 2008 había 33.000 personas jubiladas por AFJP a las que el Estado debía pagarle el 100% de sus jubilaciones porque su dinero se había evaporado, a otro tanto le pagaba la mitad y sólo un 23% cobraban enteramente de las AFJP.
Cuando el Estado se hizo cargo nuevamente de las jubilaciones, el 75% del dinero estaba invertido en bonos y acciones desvalorizados lo que produjo una brusca caída de la rentabilidad.
Para aprobar la ley por la cual las jubilaciones regresaban a ser administradas por el Estado el oficialismo contó con el apoyo de los partidos de centro-izquierda, cuando la presidenta hizo el anuncio el 21 de octubre de 2008 estaba acompañada por Amado Boudou, fue un mes después de conocerse la quiebra del Lehman Brothers.
Cristina comenta que recibió un llamado de Sergio Massa que era jefe de Gabinete que le dijo: “Acá estoy con Boudou (que estaba a cargo del ANSES), que se ha vuelto loco…¿Podemos ir a verla presidenta?” y repetía “Está con una idea muy loca”, cuando llegaron Boudou le dijo: “Bueno, presidenta, el mundo no va a volver a ser nunca lo que fue, por eso tenemos que recuperar las AFJP”.(1)
Sorprendida Cristina le preguntó “¿Cómo que hay que recuperar las AFJP?” y Boudou le respondió: “Sí, recuperar el sistema de reparto, recuperar la administración de los fondos porque estamos haciendo un pésimo negocio para el Estado, casi ridículo, y un gran negocio para ellos” y siguió “El Estado está pagando la mayor cantidad de jubilaciones, las AFJP se quedan con la crema del negocio y los ejecutivos cobran cifras millonarias en concepto de comisiones”.
Cuando terminó de exponer, Cristina llamó a Kirchner y le pidió a Boudou que volviera a explicar su idea, luego le preguntó a su esposo que opinaba y este respondió: “Estoy totalmente de acuerdo”.
Sobre esta medida Cristina dijo: “Vuelvo a afirmar que fue la medida más importante de mi primer gobierno, tan importante como la recuperación de YPF en el segundo. Lo fueron en todo sentido: simbólico, económico y político”.(2)
Desde la recuperación de la administración de los recursos de los trabajadores y jubilados se ahorraron entre 2009 y 2014, 75.502 millones de pesos en concepto de comisiones que hubieran ido a parar a los funcionarios y dueños de las AFJP.
El Fondo de Garantía de Sustentabilidad donde fueron destinados los recursos de las AFJP contaba en noviembre de 2008 con 98.000 millones de pesos para fines de 2010 había crecido a 178.000 millones de pesos.
Elisa Carrió y Federico Pinedo dijeron que era “un saqueo a los jubilados y una violación de la propiedad privada”, mientras que los medios de comunicación expresaron que era una maniobra para quedarse con el dinero de los futuros jubilados.
Clarín y La Nación se oponían, sangrando por la herida, porque las AFJP se encontraban entre sus principales anunciantes, pero además el grupo Clarín había efectuado un enorme negociado vendiéndole acciones a las AFJP por 609 millones de pesos, cotizando la acción a 35 pesos, cuando al poco tiempo su valor cayó a 9 pesos, en una maniobra en que los jubilados perdieron 400 millones.
La fiscal Alejandra Gils Carbó denunció que los gerentes de Clarín habían arreglado con los bancos, esto explica porqué la fiscal fue calumniada por el diario Clarín durante largos años hasta que durante del macrismo consiguieron su desplazamiento como procuradora.
De igual forma se explica la persecución de la que fue objeto Amado Boudou que fue apresado en una causa armada por el macrismo, el poder judicial dependiente de ese partido y con un ataque constante del Grupo Clarín, él fue el ideólogo de esta medida que benefició a los jubilados pero que le arruinó el negocio a unos pocos aprovechadores que tratan de escarmentar a aquellos que se les oponen para que no haya otros que se atrevan a hacerlo.
Por eso la presidenta señaló en el acto en que anunció la medida: “Estamos haciéndonos cargo de las consecuencias de las políticas del saqueo. Vivimos el final de una época a nivel mundial. Es por este contexto que decidimos avanzar en una decisión estratégica”. (3)
Al día siguiente Clarín atacó desde sus titulares al señalar: “Plata para la chequera del poder, en un año electoral” y dos días más tarde: “El Congreso votará una ley precaria y hecha de apuro”.
Clarín atacaba porque el gobierno le quitaba sus negocios y además el Estado pasaba a tener parte de las acciones del grupo que las AFJP habían comprado.
En Diputados la Ley se aprobó el 7 de noviembre después de catorce horas de debate con 162 votos positivos y 75 negativos, la defensa de las empresas privadas fue encabezada por Elisa Carrió que anunciaba apocalípticamente: “En seis meses no vamos a tener para pagarle a los jubilados”.(4)
El 20 de noviembre el Senado la transformó en ley con 46 votos a favor, en contra votaron el radicalismo, la Coalición Cívica de Carrió y el peronismo antikirchnerista.
Con esta Ley pasaron a poder del ANSES unos 97.920 millones de pesos que manejaban las AFJP, en 14 años las AFJP se había quedado con 9.000 millones de dólares producto de las comisiones cobradas a los trabajadores, también pasaron al Estado acciones de las principales empresas por un valor de 10.000 millones de pesos.
En 2008 también se aprobó la Ley de Movilidad Jubilatoria que implicaba aumentos en las jubilaciones que no dependía de la voluntad de un gobierno, dos veces al año en marzo y septiembre se tendría un aumento cuyo porcentaje se calculaba en base a los incrementos salariales y la recaudación previsional. Se tomó el Índice general de Precios del INDEC o el RPTE Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estatales, el más beneficioso y la recaudación previsional.
Estas medidas se suman a las moratorias decididas en los gobiernos kirchneristas que permitieron que más de dos millones de personas se pudieran jubilar, según datos de la Administración Nacional de la Seguridad Social el 51,2% de las jubilaciones y pensiones fueron incorporados gracias al Plan de Inclusión Previsional, además el total de Jubilaciones y Pensiones aumentó 109,5% desde 2003 a 2015, llegando a los 6.617.587 beneficios y alcanzando así la cobertura del 97% de las personas en edad jubilatoria, la más alta de Latinoamérica.