El Forjista
En noviembre de 1920 recibe un telegrama desde Ghilarza donde le anuncian que su hermana Emma estaba seriamente enferma de malaria, cuando viajó a su pueblo su hermana ya había fallecido, se quedó unos días compartiendo el duelo con su familia
La Segunda Internacional surgida en 1889 había sucumbido en 1916 cuando gran parte de los partidos europeos se habían sumado a sus respectivos gobiernos y burguesías en apoyo a la guerra imperialista, mientras los bolcheviques se mantuvieron con su posición contraria a la guerra.
EL PSI tenía además la vergüenza de haber tenido en sus filas a Mussolini el creador del fascismo, que según su conveniencia cada tanto reflotaba su verborragia revolucionaria aprendida en el socialismo.
En tanto para 1920 muchos integrantes del PSI se consideraban comunistas siguiendo el rumbo marcado por la Revolución Rusa y entendían que la función de todos los revolucionarios del mundo tenía como misión defenderla, porque además era agredida por los contrarrevolucionarios apoyados por las potencias capitalistas.
Gramsci hizo una alianza con el sector más combativo, el de Bordiga, que promovía la toma del poder por el proletariado como en Rusia.
Con la creación de la nueva Internacional luego de la Revolución Rusa, Lenin elogió la política de los consejos de fábrica del PSI, además conocía la existencia del periódico “L’Ordine Nuovo”.
En marzo de 1919 Mussolini crea “Los Fasci di Combattimento”, ya ese año Gramsci comprendió los peligros del fascismo: “Los grupos irresponsables de hombres armados, ya no sometidos a la disciplina del Estado o controlados por alguna autoridad responsable, que anhelan establecer poderes pretorianos en el nivel local y posiblemente una dictadura militar en el nivel nacional, coaliciones de fuerzas pseudopolíticas que no tienen intereses vitales y permanentes que defender y propugnar, sino sólo intereses y objetivos individuales y contingentes… Llegó la hora de los charlatanes, de los vendedores de humo, de las grandes promesas con largas esperas”
EL PSI estaba más metido en sus disputas internas que en el peligro que los acechaba, incluso algunos tenían la falsa expectativa que el caos reinante en el país podría terminar en una revolución proletaria.
Luego de la derrota de los Consejos de Fábrica en Turín, Gramsci llega a la conclusión de la necesidad de la creación del Partido Comunista Italiano (PCI), el camino más probable era la ruptura del PSI.
A comienzo de octubre de 1920 se realizó un encuentro de los que se consideraban comunistas, pero no llegaron a ponerse de acuerdo sobre el mejor momento para romper con el socialismo, Bordiga proponía hacerlo de inmediato y Gramsci proclamaba esperar, sin embargo se impuso la posición del primero.
A finales de 1920 Gramsci aceptó la orientación de Bordiga aunque primó la resignación, el 24 de diciembre se publicó el último número de “L’Ordine Nuovo” y la edición piamontesa de Avanti! fue bautizada con aquel nombre, pasando a ser el órgano oficial de los comunistas de Turín con Gramsci como editor, el periódico salía diariamente.
El primer número del periódico apareció el 1° de enero de 1921 con una cita de Ferdinand Lasalle “Decir la verdad es revolucionario”, el comité editorial estaba formado por Palmiro Togliatti, Alfonso Leonetti y otros conocidos de Gramsci.
El 15 de enero de 1921 se realizó el Congreso del PSI en Livorno, donde participaron los comunistas, el Congreso no aprobó las propuestas de formar el Partido Comunista y adherir a la internacional.
Al día siguiente Bordiga realizó una reunión en el teatro San Marco de Livorno y se constituyó formalmente el PCI, Gramsci permaneció en una posición marginal con Bordiga como protagonista.
Dice el autor: “La experiencia italiana fue una advertencia temprana acerca de cómo las divisiones sectarias en la izquierda podían facilitar la supremacía del fascismo, en parte por no haber tomado en serio la amenaza emergente”
Bordiga y los comunistas estaban convencidos que una dictadura fascista no era posible e hizo pocas referencias al fascismo en sus primeros documentos; Gramsci hizo silencio sobre sus discrepancias, en la primera elección a la que se presentó el PC en 1921 obtuvo 290.000 votos obteniendo dos bancas, contra el millón y medio votos de los socialistas.
Por esa época ya el fascismo había dado muestra de la violencia con que actuaba al punto que Gramsci se movía con un guardaespalda ante la posibilidad de un ataque.
Su hermano menor Mario se había unido a los fascistas en Varese donde se había establecido y había iniciado negocios, Antonio lo fue a visitar para debatir ese apoyo pero no pudo cambiar la opinión del hermano.
El Tercer Congreso de la Internacional le ordenó al PCI un cambio de rumbo promoviendo una reconciliación con el socialismo en la defensa de la democracia liberal, Bordiga se resistió, su política pareció estar justificada cuando el PSI dominado por los reformistas firmó un pacto de conciliación con el fascismo, pacto que duró poco porque el fascismo lo desconoció.
Bordiga fue reprendido por el propio Lenin, la idea de la Internacional era que el PCI era un partido con escaso apoyo popular, sin embargo el segundo congreso del PCI realizado en marzo de 1922 en Roma respaldó el sectarismo de Bordiga.
Gramsci fue nombrado representante del PCI en la Internacional, ya había realizado algunos viajes como representación de la Internacional a otros países, así que en febrero de 1922 partió con rumbo a Rusia.