El Forjista
No existe fecha exacta sobre el momento en que ingresó al partido socialista algunos señalan que en 1913 y otros incluso antes, en 1912 Mussolini fue designado secretario general del Partido Socialista y editor de Avanti!, ni bien llegó a ese cargo se definió contrario a la democracia burguesa.
La prédica de Mussolini tuvo éxito, ya en el partido socialista comenzaron a llamarlo el Duce, bajo su dirección el periódico pasó de 20.000 lectores a 100.000, esto provocó que muchos jóvenes que se entusiasmaran, incluyendo Gramsci y sus amigos.
Cuando estalló la Primera Guerra Mundial Mussolini era contrario a la participación Italia en la guerra, pero luego cambió su posición, ante la posibilidad de una invasión austríaca y el crecimiento del sentimiento nacionalista; Mussolini se sumó a esa tendencia.
Esta creciente belicosidad de Mussolini contrastaba con la posición del socialismo y provocó que fuera expulsado del partido, creando su propio periódico “Il Popolo D’Italia” con una posición intervencionista que fue el primer paso para la fundación del fascismo.
Antes que Mussolini fuera expulsado del Partido Socialista, Gramsci apoyó la política de neutralidad activa de Mussolini escribiendo un artículo en el periódico socialista “Il Grido del Popolo”, este apoyo fue utilizado reiteradamente en su contra, aunque no lo acompañó en su camino hacia el belicismo.
En abril de 1915 dio su último examen en la facultad, dejando inconclusa su carrera aunque no le faltaba mucho para terminarla, no le habían renovado la beca, pero su paso por la universidad entre 1911 y 1915 no había sido en vano, como dice el autor del libro “le habían aportado una sólida formación metodológica y valiosos contactos y redes, que darían frutos sustanciales en futuras colaboraciones y proyectos”
A esa altura había dejado de lado sus simpatías con el nacionalismo sardo y estaba compenetrado con las ideas socialistas comenzando a leer a Marx y escribiendo artículos en “Il Grido del Popolo”, comenzando a dar conferencias en organizaciones socialistas.
En noviembre de 1915 se unió al equipo de redacción de “Il Grido del Popolo” y al año siguiente colaboraba con Avanti!, se había convertido en periodista a tiempo completo, a lo largo de su carrera como periodista escribió más de mil artículos, muchos de ellos con seudónimo.
Cometió algunos errores como entrevistar al poeta simpatizante del fascismo Gabrielle D’Annunzio aunque el reportaje nunca se publicó o en 1921 enviar un artículo al Il Popolo D’Italia el diario fascista para refutar algunos de sus planteos.
El Avanti!l le pagaba 50 liras semanales y para “Il Grido” trabajaba gratis, necesitaba dar clases particulares para sustentarse.
También incursionó en sus artículos en la crítica teatral, escribió más de 200 crónicas en el Avanti!, entre 1916 y 1920, fue uno de los primeros en descubrir a Pirandello, fue un defensor del dramaturgo ante la crítica de los medios de la burguesía.
En agosto de 1917 se produjo un intento de insurrección en Turín que fue salvajemente reprimida quedando Gramsci a cargo de la edición de “Il Grido del Popolo” porque los demás miembros habían sido detenidos, también fue nombrado en el comité ejecutivo del Partido Socialista de Turín, cuyos locales fueron ocupados por el ejército.