El Forjista

El mal que aqueja a la Argentina son sus empresarios

 

El informe realizado por el Centro de Economía Política (CEPA) que ya resumimos en otra parte(https://elforjista.com/los-mas-ricos.html) con las 16 mayores fortunas de la Argentina permite sacar algunas conclusiones que abordamos a continuación.

Si te he visto no me acuerdo

Varios de ellos han comenzado a actuar durante los primeros gobiernos de Perón, por las condiciones favorables desarrolladas en esa gestión que permitió un sostenido crecimiento industrial, no obstante, ninguno de los actuales dueños adhieren a las ideas de aquel brillante líder popular y se han volcado sin disimulo hacia el liberalismo y su forma más salvaje que se conoce como neoliberalismo.

Es así como iniciaron su venturosa actividad grupos como Techint de la familia Rocca, Bulgheroni de la petrolera Bridas y el Grupo Arcor de la familia Pagani, mientras que las empresas de la familia Madanes Quintanilla dueños de Fate y Aluar, si bien existía desde tiempo antes tuvo una significativa expansión por aquellos años.

Un caso claramente en esta línea es el grupo Arcor que financia la Fundación Mediterránea de la que han salido especímenes económicos neoliberales particularmente cipayos y destructivos como Domingo Cavallo.

La hicieron acá y se la llevan afuera

A pesar que todos estos empresarios se hicieron muy ricos en la Argentina, muchos han confeccionado un entramado de empresas y fundaciones en el exterior como una forma de pagar menos impuestos en el país, mostrando una notoria carencia de patriotismo y solidaridad con sus compatriotas que posibilitaron su desmedido enriquecimiento.

El Grupo Techint tiene su radicación en Países Bajos y Luxemburgo, en 2001 trasladó su sede de Argentina a Luxemburgo.

La sede del grupo Bulgheroni se encuentra en las Islas Vírgenes.

Eurnekian es el titular de una fundación radicada en Liechtenstein y tienen sociedades radicadas en las Islas Vírgenes, Luxemburgo y España.

Edith Rodríguez de Pluspetrol tiene empresas radicadas en los Países Bajos y Luxemburgo.
Máximo Cavazzani el inventor del juego Preguntados que tiene una empresa de Software la trasladó al Uruguay.

Mientas que Coto tiene inversiones en Miami y España.

Fuga

Además de la evasión siempre está la sospecha de la fuga que es uno de los principales problemas del país que desangra la economía, los paraísos fiscales son una forma para que los fugadores logren su objetivo.

Los Panamá Papers fueron un escándalo en todo el mundo, salvo en la Argentina, por la protección y blindaje que los medios dan a Macri y a sus propios dueños que también tienen una clara tendencia a la fuga de capitales.

Pues algunos de los empresarios que forman parte de las 16 mayores fortunas del país también aparecieron en los Panamá Papers, ellos son Madanes Quintanilla con sociedades offshore en Islas Cook, Bahamas, Islas Vírgenes y Panamá, con conexiones a cuentas en Suiza, Coto con sociedades en Panamá e Islas Vírgenes y Claudio Belocopitt el dueño de Swiss Medical y el grupo América.

El vínculo con la política

Aunque la mayoría de los empresarios consideran que su éxito se debe a su destreza, es inocultable que el vínculo con la política les ha permitido realizar excelentes negocios, las privatizaciones realizadas por el menemismo fue una oportunidad para que algunas empresas crecieran exponencialmente.

Bulgheroni pagó la campaña electoral de Menem, Nicolás Caputo aprovechó su amistad con Macri para hacer negocios y quedarse con varias licitaciones realizadas en la ciudad de Buenos Aires.

Un caso claro de vínculo entre política y negocios fue la de Alberto Pierri que llegó a ser diputado en 1985 de la mano de Antonio Cafiero y luego presidió la Cámara de Diputados durante los dos gobiernos de Menem

Por último recordemos que Jorge Brito que se llevó muy bien con todos los gobiernos desde 1983, aprovechó las privatizaciones de los bancos provinciales para quedarse con varios de ellos.

Complicidad con la dictadura

Hay al menos tres grupos entre los más poderosos que han sido cómplices de la criminal dictadura cívico-militar que comenzó en 1976.

El grupo Clarín no sólo por sus publicaciones donde se mentían enfrentamientos que eran ejecuciones sino porque hicieron negocios juntos a La Nación quedándose con Papel Prensa que le fue arrebatada a los legítimos dueños luego de torturarlos.

El grupo Blaquier, cuyo dueño sigue impune fue cómplice de la llamada Noche del Apagón ocurrida en Jujuy, el ingenio de Blaquier fue el escenario del secuestro y desaparición de personas, se estima que en ese episodio se llevó a cabo el secuestro de unas 400 personas de las cuales 55 están desaparecidas.

En tanto que el grupo Federico Braun y familia fueron dueños del Astillero Astarsa donde se produjeron graves violaciones de los derechos humanos, desaparecieron 16 trabajadores del astillero y 10 fueron asesinados.

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