El Forjista
Junio de 2008
Los grandes diarios se autodefinen como formando parte de
lo que se denomina “periodismo independiente” y se identifican
a sí mismos como parte esencial de la democracia.
Al mimetizarse con la democracia, cualquier crítica que se
realice a la tarea que desarrollan, automáticamente será
calificada como un ataque a las instituciones democráticas.
Pero nadie más que ellos, y casi todos los políticos
que buscan congraciarse con esos medios, le ha asignado tal misión,
además, la historia de los medios ha mostrado que lejos estuvieron
de cumplir alguna función que las emparente con la democracia.
Si estos grandes grupos que controlan los medios de comunicación
hicieran periodismo independiente no estarían comprometidos
con ningún sector de poder en particular, ni deberían
utilizar sus páginas para autodefenderse, y si su función
hubiese sido la defensa de la democracia hubiesen actuado con alguna
dignidad durante las dictaduras que nos asolaron.
Entremos en detalles y dejemos las generalidades.
Periodismo al servicio de sus dueños
¿Se puede ser “independiente” y a la vez
utilizar sus páginas para una misión que sólo
interese al propio grupo económico?.
Cuando el 17 de diciembre de 2002, el juez federal Roberto Marquevich
dispuso la detención de la directora del diario Clarín,
Ernestina Herrera de Noble, el diario comenzó una campaña
para desprestigiar al juez de la causa.
Pocas veces se vio una campaña de prensa tan furibunda, la
cual incluyó la movilización de los periodistas del
diario y todo el aparato político y económico que reaccionó
rápidamente al ver involucrado en una figura de gran poder.
El diario comenzó a titular desde el primer día contra
el juez del caso y la detención a la que consideró arbitraria.
La razones de la detención estaban vinculadas con las dos adopciones
de los hijos de la Sra. de Noble, porque existía la sospecha
que podían ser hijos de desaparecidos y para cuya adopción
se utilizó documentación falsificada.
El proceso fue iniciado en 1995 por la denuncia de un particular que
cuestionó la veracidad de las partidas de nacimiento de los
dos hijos de la Sra. de Noble, dicha denuncia fue acompañada
por las Abuelas de Plaza de Mayo
Ambos hijos se negaron a realizarse sendos análisis de sangre
para determinar sus ADN y poder identificar fehacientemente su identidad.
A partir de la resolución del juez, Clarín comenzó
a desplegar sospechas sobre la integridad del juez, el 18 de diciembre
el diario recordó que ya existían pedidos de Juicio
Político contra el juez, los cuales habían sido archivados
por el Consejo de la Magistratura.
El 19 de diciembre Clarín Titula “Otro abuso de Marquevich
contra la directora de Clarín”
Al día siguiente:”Nuevo abuso: el juez se negó
a liberar a la señora de Noble”
El 22 de diciembre el diario publica un artículo bajo el título
“Cuatro historias escandalosas en el legajo del Juez Marquevich”
Una gran cantidad de políticos de distinta procedencia, en
busca de sus cinco minutos de fama, se ofrecieron para salir en defensa
de la Directora de Clarín. El diputado nacional justicialista
Rodolfo Martinez Llanos se apresuró al día siguiente
de la detención, a pedir el juicio político para el
juez, cabría preguntarse si este diputado fue elegido por sus
electores, para defender los intereses de quienes lo eligieron a los
de la Sra. de Noble, con una celeridad que no le vimos para otras
causas de gente no tan poderosa.
Desde el presidente de la nación de ese entonces Eduardo Duhalde,
hasta los ex presidentes de la Rúa, Adolfo Rodríguez
Saa, Alfonsín y Menem se declararon solidarios con la Sra.
de Noble
También lo hicieron Domingo Cavallo, Gustavo Beliz, Alberto
Iribarne, y el gobernador de Santa Fe, Carlos Reutemann, entre muchos
otros.
Llama la atención que el kirchnerismo que recientemente se
dio cuenta que “Clarín miente” haya sido solidario
también con la directora de Clarín: hicieron conocer
su indignación por la detención Nestor Kirchner y dos
de los Fernandez, Anibal y Alberto.
También las asociaciones de dueños de los medios de
comunicación desplegaron su solidaridad por su par en desgracia.
ADEPA (Asociación de Entidades Periodísticas) expresó
su “grave preocupación” y reclamó la “más
urgente resolución de su estado de detención”.
En tanto la SIP una asociación muy vinculada a los intereses
norteamericanos mostró su preocupación por la detención
y reclamó “se garantice el derecho a la defensa y el
caso se resuelva con la mayor celeridad”.
Todo esto en medio de una causa que no tenía ninguna vinculación
con la actividad del diario, el cuál siguió funcionando
sin inconvenientes y desplegando todos sus recursos para cuestionar
al juez de la causa.
Tampoco la Iglesia quiso estar ausente en este festival, el cardenal
Bergoglio y el obispo Jorge Casaretto expresaron su cuestionamiento
por la detención.
Los empresarios dieron su presente en las figuras de Paolo Rocca,
Enrique Pescarmona y Osvaldo Cornide, entre otros.
La asociación llamada Periodistas y que estaba integrada por
Santo Biasatti, Nelson Castro, Mariano Grondona, Jorge Lanata, Ricardo
Kirchbaum, Magadalena Ruiz Guiñazú y otros, dieron a
conocer un comunicado donde denunciaban que la detención implicaba
“una amenaza para la libertad de expresión y para quienes
ejercen la función de informar”. Cabe señalar
que algunos de los firmantes ya eran o lo fueron posteriormente empleados
de la Sra. de Noble.
El 20 de diciembre el diario, expresión del “periodismo
independiente”, publica una apología de su Directora,
se decía ahí:
“Precisamente la libertad de prensa, los derechos humanos, el
fortalecimiento de la democracia en la Argentina y las demandas sociales
básicas insatisfechas en el país son y han sido parte
de su compromiso humano y profesional.”
“Cuando esta pesadilla termine y vuelva a reunirse con sus hijos,
Ernestina Herrera también tornará a su puesto al frente
de Clarín y a su compromiso con "la libertad de expresión,
con la libertad de prensa y con la libertad de espíritu, tres
valores que conforman la esencia de esta casa y que se resumen en
uno solo: el derecho de cada persona a pensar, opinar y expresarse
libremente", como señaló ante The Freedom Forum,
foro de prestigio mundial.”
Esto nos obligará a incursionar más adelante en el comportamiento
del diario Clarín durante la dictadura para verificar si efectivamente
existía ese compromiso con la democracia y los derechos humanos.
El 22 de diciembre de 2002 Clarín le cede una columna al radical
Gil Lavedra que sorprendentemente en su defensa de la Sra. de Noble
indica: “La medida ha causado una fuerte conmoción, sorpresa
y estupor, no sólo porque aparece como de una arbitrariedad
evidente, frente a las reglas de derecho positivo que autorizan el
encarcelamiento durante un proceso judicial, sino además porque
la población abriga la fundada creencia de que los jueces suelen
actuar con benignidad ante las personas con poder.”
Efectivamente la Argentina no está acostumbrada a que se detenga
a personas con poder, cuando esto ocurre pareciera que todos los que
tienen alguna cuota de ese poder se aúnan para encarar su defensa
corporativa, obviamente esto podrá llamarse de muchas maneras
pero muy poco tiene de contacto con las metodologías democráticas.
El 23 de diciembre la Sra. de Noble obtiene la libertad, pero la maquinaria
desatada con su detención no se detendrá, en tiempo
record para los habituales de la justicia el juez Marquevich fue destituido
en junio de 2004 por mal desempeño en los deberes de funcionario,
exceso de poder y arbitrariedad, también se solicitó
que se iniciaran causas en la justicia para determinar si había
cometido delitos, estas acusaciones surgieron por la detención
de la Sra. de Noble.
En octubre de 2005 se iniciaron causas judiciales al ex juez Marquevich
por privación ilegítima de la libertad, falsedad ideológica
y violación de secretos.
Mientras estas causas avanzan, la que investiga la identidad de los
hijos de la Sra. de Noble ha estado paralizada.
El 2 de junio de 2008 el Diario Crítica de la Argentina informa
que las Abuelas de Plaza de Mayo podrán se querellantes en
la causa donde se investiga si los hijos adoptivos de la Sra, de Noble
eran hijos de desaparecidos.
La sra. de Carlotto. Presidenta de la Abuela de Plaza de Mayo indicó
que en esta causa la justicia ha sido muy lenta.
El representante legal de las Abuelas, Luciano Hazan, indicó
que en el expediente: "se comprobaron gravísimas irregularidades
en las adopciones de los dos niños, Marcela y Felipe",
para agregar que "la causa estuvo deambulando en distintos tribunales,
sin tener ningún avance en los últimos seis años".
El expediente “principal” estaba a estudio de la Corte
Suprema, quién finalmente hace unos días avaló
lo solicitado por los hijos de la Sra. de Noble que aceptaron realizarse
el estudio de ADN pero no que sea comparado con el Banco Nacional
que existe en el Hospital Durand, de esta manera la comparación
sólo se efectuará con las de las familias querellantes
de la causa.
Por cierto en esta nota no pretendemos abrir juicio sobre la causa
contra la Sra. de Noble, ni sobre el juez interviniente, lo que quisimos
mostrar que la Sra. de Noble por ser dueña de un medio de comunicación
es una ciudadana VIP, que es considerada una “intocable”
por todos aquellos factores de poder que asumieron su defensa.
Cualquier otro ciudadano que hubiese sido víctima de la arbitrariedad
de un juez, y no decimos que en este caso estemos ante una arbitrariedad,
no hubiese merecido una sola línea en ningún medio de
comunicación, esto nos muestra una evidente desigualdad ante
la ley, uno de los principios esenciales de la democracia.
La Sra. de Noble quién puede pagar excelentes abogados, debió
utilizar de sus servicios para defenderse y no utilizar su diario
para uso personal.
Lo otro que quisimos mostrar es como los medios de comunicación
lejos de estar al servicio de la comunidad lo están al de sus
dueños y los fuertes intereses económicos que esos medios
defienden.
Entremos brevemente ahora en otra situación que implicó
a otro dueño de un diario.
En 1991 explotó un escándalo al conocerse que ricos
y famosos ingresaban al país costosos autos importados haciendo
figurar que eran para discapacitados, los cuales estaban libres de
impuestos, en esa situación fueron detectados Susana Jiménez,
Ricardo Darín, el dueño de la Editorial Atlántida,
Constancio Vigil y el ya fallecido director de Ambito Financiero,
Julio Ramos.
Quién ideó la maniobra fue Cacho Steimberg el único
que estuvo algún tiempo detenido, importador de autos y amigo
de los hijos de Carlos Menem.
El juez interviniente decidió el allanamiento de la residencia
de Julio Ramos, una escribanía y las instalaciones Ambito Financiero.
El director de Ambito Financiero decidió defender la importación
trucha de autos desde su medio, equiparándose a los revolucionarios
de Mayo y mencionando la Representación de los Hacendados de
Mariano Moreno para justificar el contrabando de su Mercedes Benz.
En su contra ataque, Ramos denunció ser víctima de persecución.
Aún cuando la importación hubiese sido ilegal el director
de Ambito Financiero no lo ocultaba, de tal forma que llegó
en su Mercedes importado truchamente al casamiento del ex montonero
Galimberti, realizado en Punta del Este y adonde concurrió
buena parte de la farándula.
No por ridículo deja de ser por demás demostrativo como
los medios son utilizados para uso personal de sus dueños,
de “independencia” poco y nada.
Periodismo al servicio de la dictadura
Nos referiremos a dos diarios, La Nación y Clarín,
y su actitud durante los gobiernos de 1976 a 1983, ambos saludaron
el advenimiento del gobierno militar del 24 de marzo de 1976, que
se constituyó en una dictadura sangrienta que liquidó
a gran parte de una generación y hipotecó el futuro
económico del país, al servicio de los poderes financieros
internacionales.
Como ya dijera alguien anteriormente, Clarín asumió
la función de “Boletín Oficial” de la dictadura,
todos los comunicados militares tuvieron una amplia difusión
en sus páginas, Clarín prefirió no opinar sobre
las noticias, pero cumplió un servicio importante al servicio
de los dictadores al publicar casi sin excluir palabra, los muchos
comunicados que las distintas áreas del gobierno emitían
a diario.
Cada acto que se realizaba en Clarín contaba con la consabida
invitación a las autoridades militares, esta actitud le valió
un tránsito sin tropiezo a lo largo de la dictadura. ¿Será
esto lo que la Sra. de Noble llamaba compromiso con la democracia
y los derechos humanos?
El papel de La Nación fue un tanto diferente, al primer día
del golpe este diario adquirió una clara actitud militante,
cómplice podríamos decir, con la dictadura.
Llama la atención que en la actualidad La Nación trate
de dar lecciones de democracia cuando su actitud en lo años
de sangre fue de una complicidad criminal.
Veamos algunos ejemplos.
En junio de 1976 fue asesinado en Buenos Aires el Gral. Torres, quien
fuera presidente boliviano, derrocado por la oligarquía de
ese país en alianza con el imperialismo norteamericano, el
Gral. Torres se encontraba exiliado en nuestro país. Pocos
días antes habían sido asesinados dos legisladores uruguayos
que también se encontraban exiliados en la Argentina.
El comunicado del Ministerio del Interior denunciaba “una campaña
muy bien dirigida desde el exterior para desprestigiar a las actuales
autoridades y entorpecer el Proceso de Reorganización Nacional”.
Como se conoció recién durante los años de la
democracia, existió el Plan Condor por el cuál las dictaduras
del sur de América coordinaban su políticas represivas
tendientes a quitarse de encima a militantes populares como lo fuera
el Gral. Torres. Lo que el gobierno argentino trataba de ocultar era
su responsabilidad en el asesinado de Torres.
El diario La Nación dijo en una editorial del 4 de junio de
1976: “Pero si puede aceptarse la posibilidad que se esté
coordinando desde el extranjero una conjura siniestra contra la Nación.
Por razones que no cuesta mucho comprender, también es preciso
reparar en nuestras propias circunstancias, en las que tienen el sello
inequívoco de la guerrilla”.
Por eso llamamos de cómplice con la dictadura a la actitud
de La Nación, al tratar de desviar en este caso la responsabilidad
hacia los grupos guerrilleros, cuando ninguno de ellos tenía
ni remotamente al Gral. Torres entre sus enemigos, en cambio este
general con ideas de izquierda nacional era un evidente enemigo de
los dictadores argentinos y bolivianos.
Lo que más entusiasmaba a La Nación era la política
económica desarrollada por Martinez de Hoz, un artículo
firmado por un tal Ramón L. de Oliveira Cesar del 17 de junio
de 1976 señalaba:
“En poco más de dos meses que llevan las nuevas autoridades,
el país ha podido palpar un positivo cambio de atmósfera
en su nivel general de actividad. El plan económico del Ministro
de Economía contribuyó, en parte, al resurgimiento de
la perdida confianza, tal vez, más que su técnica, fue
su espíritu lo que suscitó la aprobación de las
fuerzas vivas del país… Las nuevas medidas ya dieron
frutos: nuevas leyes y agilización impositiva, modificaciones
cambiarias; ajustes tarifarios; liberación de precios, apoyo
al agro, eliminación de las cuotas de faenamiento; supresión
de los monopolios de la junta de granos y de carnes; etc”
Como puede apreciarse a La Nación le interesa el campo y sus
grupos concentrados, para este diario ese es el país, el resto
poco interesa.
Luego de una gira por los Estados Unidos el ministro de Economía,
Martinez de Hoz, firma el primer acuerdo con el FMI y comenzaba la
política de endeudamiento externo que exterminó la producción
del país.
Una editorial de La Nación del 20 de junio de 1976 decía
lo siguiente:
“El éxito innegable de las gestiones del Ministro de
Economía, Dr. José Alfredo Martinez de Hoz, realizadas
en Washington y Nueva York, no puede constituir una sorpresa. El 15
de agosto del año pasado señalamos desde estas columnas
al Ministro de Economía de esos días como podría
obtener crédito externo”.
Pero la alianza entre la dictadura y los grandes diarios no fue sólo
coincidencia ideológica, también hubo un negocio redituable
para ambas partes, el nombre del mismo fue Papel Prensa.
Papel Prensa es una empresa mixta con la participación del
Estado y los diarios Clarín y La Nación, este negocio
le aseguraba al gobierno la docilidad de esos periódicos sin
necesidad de ningún tipo de presión, y a los diarios
les brindaba la provisión de un insumo esencial a un precio
más que conveniente, además los colocaba en una posición
por demás privilegiada con respecto a sus competidores.
Con la llegada de la democracia, algunos grupos como el que lidera
Clarín siguió incrementando sus negocios hasta convertirse
en uno de las empresas más poderosas:
Con la privatización de las radios se hizo acreedora de Radio
Mitre y la Fm100, durante el gobierno de Menem el canal 13 pasó
a formar parte del Grupo Clarín, también cuenta con
el 60 % de Cablevisión y el 98% de Multicanal, está
asociada al diario La Nación en Papel Prensa y la agencia DYN.
Controla un 50% del canal TyC Sports, el 30% de Ideas del Sur, la
empresa de Tinelli, y 30 % de Polka, como si fuera poco tiene los
canales de cable Todo Noticias, Volver y Magazine.
Podemos seguir porque hay muchas más empresas pero con estas
creemos haber dado un panorama del poder económico de este
multimedio.
El grupo Clarín se vio particularmente favorecido durante la
gestión del kirchnerista, por decreto 527 del año 2005
el ex-presidente Néstor Kirchner decidió prorrogar por
10 años las actuales concesiones de radio (Radio Mitre por
ejemplo) y televisión (Canal 13 por ejemplo), una vez vencido
ese período las concesiones podrán prorrogarse por 10
años más. Otro favor y todo con un simple decreto. Por
cierto, que ningún medio se quejó por no haber recurrido
al Congreso. La concesión de Canal 13 vencía el 2005
y ahora podrá continuar hasta el 2015 con opción a continuar
hasta el 2025.
Otra empresa del grupo Clarín es la operadora de televisión
por cable, Multicanal, el gobierno de Kirchner no puso objeción
alguna para que se fusionara con otro operador, la empresa Cablevisión,
de esta manera se conforma un oligopolio que concentrará más
del 70 % del mercado.
El último ejemplo para mostrar que Clarín fue una especie
de niña mimada del kirchnerismo, se pudo apreciar cuando Kirchner
y Lavagna anunciaron su pacto desde la quinta de Olivos, el diario
tuvo la primicia y fue el único invitado a la presentación
del acuerdo.
Creemos haber dejado en claro que cuando Clarín o La Nación
hablan de “libertad de prensa”, no nos hablan de otra
cosa que de continuar incrementando sus negocios y que no van a permitir
ninguna intromisión ni del Estado, ni de los ciudadanos, no
existe en ellos el más mínimo interés en defender
la libertad de expresión.
Periodismo con listas negras
Los grandes diarios llenan sus páginas reclamando
libertad de expresión, veamos si ellos tuvieron una conducta
acorde a ese reclamo.
Durante el gobierno de Alfonsín el senador nacional por la
UCR, Ricardo Laferriere, presentó un proyecto para que se legislara
sobre el llamado Derecho a Réplica de tal manera que cualquier
ciudadano pudiera publicar sus ideas en un medio de comunicación
cuando se sintiera agraviado u ofendido por las opiniones de ese medio.
Esto decisión que posibilitaría por primera vez que
la libertad de expresión fuera un derecho de todos los ciudadanos
y no sólo de los que tienen dinero, fue combatido por los grandes
medios que al unísono gritaron que se trataba de un atentado
contra la “libertad de prensa”, que como enseñó
Jauretche no se trata de otra cosa que de la “libertad de empresa”
que es sólo para unos pocos.
Actualmente sólo el diario Crítica de la Argentina ofrece
la posibilidad al Derecho a Réplica y no parece haber afectado
a ese medio en su libertad de comunicarse con sus lectores.
El ex senador Ricardo Laferriere quedó sólo, su bancada,
algo bastante común en los radicales, se asustó al ver
los poderes que se levantaron en contra del proyecto.
A partir de ese momento Ricardo Laferriere no tuvo espacio en los
medios de comunicación y su carrera política se fue
diluyendo, al asumir otro radical la presidencia, Fernando de la Rua,
fue designado embajador en España.
El escritor, funcionario menemista, acompañante en la fórmula
del represor neuquino Sobish y humorista, Jorge Asís, publicó
en 1984 una novela llamada “Diario de la Argentina” donde
contaba algunos aspectos de la vida cotidiana en el diario Clarín,
donde él trabajó, durante la época de la dictadura.
Esa actitud fue considerada como un acto de alta traición por
el diario de la Sra. de Noble y a partir de ese momento, según
palabras del propio Asís: “me proporciona tres años
de absoluta soledad y silencio”.
Una de las cuestiones que se muestran en ese libro era la conexión
de este “diario independiente” con el desarrollismo, partido
en extinción, que por aquellos días controlaba al periódico,
hoy el diario sólo responde a los intereses de su grupo y sus
asociados y a la forma de expandir aún más su cadena
de negocios.
No hace mucho tiempo ante las cámaras del canal de cable TyC
Sports, dos periodistas se cruzaron en una discusión violenta
en el programa Estudio Futbol, uno era el director de Deportes de
Clarín, Horacio Pagani, y el otro era Alejandro Fabri, quién
trabajó para Clarín en los años de la dictadura,
siendo muy jóven.
En esa discusión Fabri señaló que en Clarín
no se podía criticar a Menoti, ya anteriormente varios periodistas
deportivos han indicado que durante la dictadura militar estaba prohibido
criticar a Menoti, Clarín siempre sostuvo una clara línea
menotista. Como vemos hasta en temas deportivos la libertad de expresión
puede estar seriamente comprometida cuando se deja en manos de las
grandes empresas de comunicación.
Periodismo para la idiotización
El incremento de los negocios de los grupos que controlan
los medios de comunicación, los ha llevado a poner sus espacios
al servicio del rating de los programas de televisión que tienen
mayor audiencia dentro de su propio multimedio.
De tal manera es posible ver a los periodistas del noticiero de Telefe
informar “seriamente” sobre las nominaciones en Gran Hermano
o sobre los últimos sucesos “importantes” ocurridos
dentro de la casa.
También se puede leer en Clarín informes detallados
sobre las peleas de las vedettes y modelos que participan en Bailando,
Patinando o Cantando por un Sueño.
Esos mismos medios se auto asignan una función sacrosanta en
la democracia y en la educación del ciudadano, sin embargo
cada vez cumplen un papel más determinante en el proceso de
idiotización masiva que intenta la televisión con programas
como los mencionados.
Tras la excusa de entretener al público se filtra la ideología
del egoísmo y la ausencia de solidaridad.
Esta televisión nos enseña que para ganar cualquier
cosa es válida: engañar, mentir o congraciarse con el
jurado.
Además en estas competencias pueden ocurrir cosas maravillosas
como que gane una competencia de canto aquella o aquel que peor canta,
así que a no perder las esperanzas cualquiera puede ganar.
En estos programas el prójimo no es otra cosa que un competidor
al que hay que ganarle
por las buenas o por las malas.
Como nos muestra a diario el tinellismo o el pergolinismo, haciendo
gala de su particular viveza criolla, el prójimo es un excelente
objetivo para nuestras burlas, de tal forma que gran parte de nuestra
diversión consistirá en dejar a algunos de nuestros
smejantes como verdaderos idiotas, no importa si la excusa es un cámara
oculta o un partido de futbol.
Estos medios de comunicación se han cuidado muy bien de calificar
a estos programas como parte de la televisión basura, calificativo
que utilizaban con Mauro Viale u otros programas de ese tipo, para
nosotros no cabe duda que deberían ser incluidos.
Pero los grandes grupos económicos que manejan los medios de
comunicación tienen intereses concretos que los convierten
en socios de la televisión basura que padecemos cada día.
La libertad de expresión es otra cosa
Este derecho que ampara la Constitución Nacional es
sin duda el oxígeno indispensable de cualquier democracia,
pero en muy pocos países existe en realidad, lo que sí
existe es la posibilidad de los grupos económicos a defender
sus intereses o los de sus asociados, a la vez que sacan de carrera
a todo aquel individuo o sector que intente poner límites a
su accionar o simplemente cuestione sus ideas.
La ley de radiodifusión con sus modificaciones es la que continúa
vigente desde la dictadura, algunos de los cambios realizados buscaron
permitir la concentración de los
medios en pocas manos, a la vez que se ponía trabas a las cooperativas,
sindicatos, universidades y asociaciones sin fines de lucro. Modificar
esta ley para democratizar los medios de comunicación es una
materia pendiente de la democracia argentina.
Diversificar en vez de concentrar parece ser la consigna para que
mayor cantidad de gente tenga acceso a los medios de comunicación.
Es indispensable evitar la concentración en pocas manos.
Tanto Arturo Jauretche como Scalabrini Ortiz estudiaron los mecanismos
utilizados por el aparato cultural de la oligarquía, del cual
los medios de comunicación son una parte, para generar prestigio
en aquellas personas que les interesa difundir por sus coincidencias
ideológicas e intereses económicos, y demonizar a aquellos
individuos que cuestionan su poder. O lo que muchas veces les resulta
más sencillo, silenciarlos y no dejar que una sola palabra
se filtre y llegue a la ciudadanía.
Hay que arbitrar los medios para que cualquier ciudadano pueda expresarse
libremente, el Derecho a Réplica es sólo una de las
opciones, hay que exigir a los medios privados y estatales que posibiliten
ese acceso.
Hasta ahora, y por el momento no hay indicios que esto vaya a cambiar,
cuando se habla de libertad de prensa, en realidad se está
indicando que los grandes medios son intocables y que no están
dispuestos a soportar el más mínimo recorte de su poder.