El Forjista
Gramsci pasó en prisión los últimos 10 años y medio de su vida, de sus compañeros de militancia Palmiro Togliatti fue un leal stalinista que permaneció como secretario general del PCI hasta su muerte en 1964, Angelo Tasca terminó como funcionario del gobierno de Vichy que colaboró con la ocupación nazi de Francia y murió en la mayor deshonra.
Su amigo Piero Gobetti murió en febrero de 1926 de bronquitis e insuficiencia cardíaca estando exiliado en París con 24 años, después de la paliza que le habían dado los fascistas el año anterior, cuando también incendiaron su casa.
Desde fines de 1935 no podía trabajar de manera sistemática en sus cuadernos, la mayoría de sus notas las había concluido entre 1929 y 1933, se las arregló para llevar sus cuadernos desde la cárcel de Turi a las clínicas en la que estuvo después, la mayor parte del tiempo los textos estuvieron guardados en un depósito por orden de las autoridades carcelarias que lo obligaban a redactar solicitudes individuales para consultarlos.
Cuando Gramsci murió Tatiania Schucht, fue la primera en valorar la importancia de esos escritos, consiguió sacar de contrabando los cuadernos y los depositó en la bóveda de un banco.
Tania regresó a Moscú en 1939 y murió de tuberculosis en 1941, Eugenia y Julia tuvieron una larga vida siempre leales al régimen soviético y entre ambas criaron Delio y Giuliano que fueron ingeniero y músico respectivamente.
Los cuadernos fueron trasladados poco tiempo después de la muerte de Gramsci en valija diplomática bajo la supervisión de Vincenzo Bianco, el principal contacto de Gramsci con la dirección del partido en el exilio y con su familia en Rusia.
Em un principio no hubo interés por el contenido de los cuadernos por la atmósfera política de fines de 1930 y luego por la guerra mundial.
Una vez finalizada la Segunda Guerra, el PCI surgió como un partido poderoso que actuó dentro de la democracia liberal bajo la conducción de Togliatti, mientras eran obedientes a las instrucciones de la Unión Soviética, aún después de la muerte de Stalin, en Italia actuaban más bien como un partido socialdemócrata.
Los cuadernos de la cárcel fueron publicados por primera vez en Italia en seis volúmenes entre 1948 y 1951, desde ese momento muchos pueblos y ciudades tienen alguna calle o plaza con su nombre, recién en 1975 se publicaron enteramente en cuatro volúmenes.
También una edición de las cartas desde la cárcel cuya primera publicación fue de 1947, con 218 cartas, sin embargo, el PCI alteró algunas para borrar referencias positivas a Bordiga, en 1965 apareció otra edición con 428 cartas.
En épocas recientes hubo un florecimiento del interés por su obra, la visión política de Gramsci, sus conceptos de hegemonía y subalternidad tienen absoluto sentido en la actualidad tratando de explicar por qué las personas se someten a su propia opresión y explotación.
El autor Andrew Pearmain, cita a un locutor de radio de ultraderecha norteamericano, Rush Limbaugh, que describió a Gramsci como el arma secreta de la izquierda pero que por suerte para ellos, los derechistas, la izquierda se niega a usarla, a eso se suma que Gramsci es poco conocido.